Seguramente, casi todas las personas alguna vez estuvieron celosas. Para algunos, los celos ocasionales son incluso parte de una asociación. Sin embargo, con las llamadas de control y las escenas de celos, uno pone rápidamente en riesgo su relación. Mostramos lo que puedes hacer para controlar tus celos.
¿Qué es la envidia?
Los celos son una mezcla de múltiples emociones. En el primer plano hay un temor atormentador de perder el afecto o la atención de un cuidador importante hacia otra persona.
Por lo general, no importa, hay una razón realista para los celos o no. Además del miedo a la pérdida, los celos suelen ir acompañados de ira, tristeza, desconfianza, sentimientos de inferioridad y, a veces, de agresión.
Agudos desencadenantes de los celos.
En las relaciones, los celos no son un fenómeno raro, independientemente del género. Mientras que los hombres, según las encuestas, tienen más probabilidades de sospechar celosamente de la infidelidad sexual de su pareja, los celos en las mujeres generalmente son provocados por la intimidad de su pareja con una tercera persona.
Pero incluso en las amistades y las familias hay celos. Por ejemplo, incluso los niños pequeños están celosos si sus padres prestan más atención a los hermanos.
Causas básicas de los celos.
Los celos pueden tener diferentes causas. Principalmente surge de la duda y de una baja autoestima. A veces, las experiencias negativas en el pasado, como la infidelidad de un ex compañero o las experiencias infantiles, pueden desencadenar el miedo a la pérdida.
¿Cuánto es normal?
Los celos pueden ocurrir en diferentes intensidades. Un poco de celos es normal y no es motivo de preocupación. Normalmente, la sensación persistente desaparece cuando se resuelve la situación problemática. Sin embargo, si los celos son permanentes, pueden convertirse en un problema.
Reconocer signos
Si una pareja es posesiva y trata de aislar a la otra, puede ser un signo de celos patológicos. Al revisar las llamadas y buscar las pertenencias personales, los compañeros con una envidia mórbida tratan de encontrar evidencia de la infidelidad del otro. Tal comportamiento tensa una relación y a menudo lleva a peleas.
Consecuencias de los celos patológicos.
Si las personas celosas están dominadas por el miedo a perder a su pareja, a menudo descuidan su trabajo y sus contactos sociales. Además, a menudo sufren trastornos del sueño y de la concentración.
Además, los dolores de cabeza, el dolor de espalda o el dolor de estómago, así como las quejas psicosomáticas no son infrecuentes en personas muy celosas.
Los celos como forma extrema.
La forma más extrema de los celos son los celos, también conocidos como Síndrome de Othello. En este trastorno delirante, la persona afectada está firmemente convencida de la infidelidad de la pareja y está buscando meticulosamente pruebas. Los argumentos lógicos son completamente inútiles contra la certeza subjetiva de los pacientes.
Esta forma de celos es bastante rara y generalmente ocurre en relación con el alcoholismo, la esquizofrenia o la demencia. En el contexto de la terapia a menudo se utilizan medicamentos.
¿Cuándo se debe combatir los celos?
Todos juzgan los celos de manera diferente. Para algunos es una prueba de amor, para otros un asesino de relaciones. Básicamente, si te das cuenta de que tus propios celos debilitan la relación o la de los demás, es necesario controlar los celos.
Es importante buscar la causa no en el comportamiento de la pareja, sino en uno mismo. Si no puede controlar sus celos solo, debe buscar ayuda terapéutica. Esto es especialmente recomendable cuando el miedo a la pérdida está profundamente arraigado.
Superar los celos
Controlar los celos de uno requiere mucha práctica y es especialmente difícil en caso de celos fuertes. Primero, debes investigar de dónde viene el sentimiento. A menudo se basa una insatisfacción duradera en la relación.
Si los celos permanecen dentro de un marco normal, puede ayudar a dirigir abiertamente el problema a la pareja, formular sus necesidades y acordar concretamente dónde se encuentran los límites de la tolerancia. A través de empresas conjuntas, las parejas afectadas también pueden consolidar su sentido de unión.
Derrota los celos a través de la autoestima.
La autoestima y la autoestima positiva son medios importantes contra los celos, para no ser una amenaza para otras personas alrededor de la pareja. Los siguientes consejos pueden ayudar:
- Esté atento a los signos de afecto de su pareja.
- Sé consciente de tus fortalezas.
- Trátese como comprensivo y benévolo como un buen amigo.
- Tenga en cuenta que no tiene por qué avergonzarse de sus errores y debilidades.
- Fíjese un objetivo como quiera ser, en lugar de compararse con ideales extraños.
- Sea más independiente: encuentre sus propios pasatiempos y salga solo.
Los ataques celosos se ponen bajo control.
Amenaza un ataque de celos, exige un control temprano y no se sienta abrumado por el sentimiento. Sé consciente de tus celos y lucha contra ellos:
- Inhala y exhala lentamente, y trata de relajarte.
- Diga internamente "Deténgase" en voz alta.
- Comprende que tu pareja te ama y recuerda tus fortalezas.
- Distraerse, por ejemplo, a través de deportes o una conversación con un amigo.
Si la pareja esta celosa
La mayoría de los compañeros de personas celosas sufren de control constante, falta de confianza y sospecha.
Si los celos van demasiado lejos, debe mostrarle a su compañero que no está solo con sus miedos. Pero también déjele claro que tiene que superar su miedo a la pérdida y, si es necesario, aconsejarle que busque ayuda profesional para combatir sus celos.
Diferencias entre los celos y la envidia.
La envidia y los celos a menudo se confunden, pero designan diferentes sentimientos: a diferencia de las personas celosas, las personas envidiosas no temen perder a un ser querido, sino que desean tener algo que otros posean.